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D E N U N C I A
STOP A LA FABRICACIÓN Y COMERCIO DE ARMAS

Texto del "Círculo Mujeres en Pie de Paz" de Arboleda de Gaia.

Muchas personas desconocen que desde hace décadas los gobiernos españoles han traficado con armas incumpliendo con descaro y desfachatez las limitaciones establecidas por la Ley en los casos en que “…puedan ser empleadas con fines de represión interna o en situaciones de violación de derechos humanos, o puedan vulnerar los compromisos internacionales contraídos por España”.

Encontramos vergonzoso que una gran parte de nuestro potencial económico se destine a la fabricación y compra de armas, ya que éstas no sólo matan o hieren a soldados, sino que están pensadas y diseñadas para atacar la población civil, como por ejemplo sucede con las bombas de racimo.

En 2011 el gasto militar del estado español fue de 17.248 millones de euros. Si lo comparamos con las partidas de otros ministerios podemos tener una noción de su desmesura, ya que se destinó al gasto militar 2.535.000 € más que a Sanidad y Política Social; 2.779.000 € más que a Educación y 2.546.000 € más que a Justicia. La deuda que arrastra el Estado español por sus compromisos en gasto militar llega a los 36.000 millones de euros.

La postura ha sido la misma con los dos partidos mayoritarios pues, si bien fue Aznar quien firmó gran cantidad de contratos, Zapatero los incrementó durante su gobierno. Ambos gobiernos han incumplido descaradamente la ley de Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (ley 53/2007), vendiendo grandes cantidades de armas a estados que incumplen claramente las limitaciones establecidas en dicha ley.

Al investigar sobre el tema de las armas se nos ha partido el corazón al descubrir que hay personas que emplean su inteligencia y creatividad en imaginar bombas que parezcan latas de refrescos o pelotas de tenis. Estas bombas están diseñadas para que el 33 % de las mismas no exploten al caer. Quedan allí, en espera de que alguien (generalmente la gente menuda) las coja. La idea es que se hace más daño al “enemigo” mutilando gravemente a la población que matando.

Además, materiales como el uranio, que son usados para incrementar el poder destructivo de estas armas, contaminan la naturaleza en la que son utilizadas. De este modo, no sólo provocan muerte y heridas, sino que impiden durante años que la población pueda seguir cultivando la tierra para alimentarse, y generan enfermedades graves y difíciles de tratar.

Pero el súmmum de la desfachatez y del desdén por la vida de la gente es la postura de la empresa española Instalanza. En la Convención de Oslo de 2008 varios países, entre otros España, renunciaron a continuar fabricando o almacenando bombas de racimo, de tremendo poder destructivo. Como Instalanza las fabricaba y tenía pendiente el cumplimiento de contratos con el estado español exigió una compensación de 40.000.000 € por la anulación de los encargos previos del estado. Pedro Morenés, representante de Instalanza hasta mediados de 2011, es el actual ministro de Defensa del estado español.

AVERGONZADAS POR ESTA REALIDAD NOS HEMOS PUESTO EN PIE DE PAZ PARA QUE EL ESTADO ESPAÑOL 
CESE DE INMEDIATO LA FABRICACIÓN Y VENTA DE ARMAS.

PROPONEMOS EMPEZAR POR EXIGIR:
El cumplimiento riguroso de la Ley de Comercio Exterior de Material de Defensa y Doble Uso (ley 53/2007), que impediría las vergonzosas exportaciones de armas a países que las utilizan contra la población civil.

Fuentes utilizadas:
- Distrito 19, febrero 2012, Nº 149, página 8. www.distrito19.org. Alicia Delgado.
- Centre d’estudis per a la pau. J.M. Delás.
- Un mundo en llamas. Nora Fernández.
- El mejor traficante de armas abandona la Moncloa. Gervasio Sánchez. 18 de diciembre 2011.